Coco Nomdedeu

Una chica simple, de carácter amigable y al igual que su apariencia de sentimientos frágiles. No suele ir derramando miel a todas las personas que se topan en su camino, más no duda en acercarse de vez en cuando, brindar la mano a los extranjeros y procura mantener una buena relación con todo aquel que le busque. Como muchas otras oculta cierta timidez entre sonrisas y manías raras como jugar con su cabello o manos, ante los desconocidos intenta ocultar que sus nervios le dominan pues considera que eso molestaría al prójimo, también se le ve como una joven que brinda apoyo emocional dispuesta a escuchar aunque sea el más mínimo de los problemas una y otra vez de ser necesario, apelando a la empatía.

Calma y serena, suele verse guardando silencio por el simple gusto de la paz que este brinda. Intenta ser lo más honesta posible aunque sus propias inseguridades suelen llevarla a decir mentirillas blancas para encubrir su pena, más una vez tiene confianza suficiente puede expresarse con toda naturalidad. Tiende a sonrojarse demasiado, cayendo en el estereotipo común entre las jóvenes, más ello le lleva a ser algo impulsiva y actuar antes de pensar siempre acabando por disculparse mil veces por todos los errores que comete. La torpeza no se le escapa en especial cuando camina pues nunca se fija por donde va, dándole aires de ser ja cabeza hueca avalado por sus estudios nulos y vida de campo. Otra cosa que le caracteriza es el odio a que los demás se insulten sea el motivo que fuese, llegando a sentir el mismo enojó que las personas involucradas.

A pesar de todo puede ponerse firme cuando se necesita, pese a tender una debilidad por ayudar a los demás puede negarse para demostrar que este siempre pudo haberlo hecho por su cuenta, sin mencionar que cuando por fin se le hace enojar puede dejar salir su demonio interno. No es ajena a las rabietas, cayendo muchas veces en llantos infantiles que no sabe cuando parar, se aferra demasiado a las cosas que ama sin dejarlas ir por nada del mundo y esto sólo conlleva a la depresión una vez las ha perdido. Alguien que no sabe cuando rendirse, pero abierta a la crítica y consejos de quien considera alguien de confiar.

Una joven de al menos unos 1.58 metros y apariencia esbelta, delgada en extremidades y frágil apariencia, siempre se le confunde con una menor por sus facciones finas e infantiles, en especial por esos enormes ojos y expresivos color rosado así como su eterna sonrisa sobre sus delgados labios. Tanto sus manos como pies son pequeñas así como su busto y trastero permanecen modestos, su piel es de un color moreno tirando al caramelo, sin ser demasiado oscuro pero tampoco claro. Su cabello permanece siempre intacto, lacio, en corte recto, de brillo y suavidad impecables que suelen cubrir sus hombros descubiertos y llegando hasta su espalda, de un color castaño brillante.

Siempre se le ve con el mismo vestido blanco holgado que parecen ser dos piezas, manteniendo la superior como un tipo de chal que deja sus hombros desnudos y con los bordes adornados de brillantes amarillos. Zapatos de piso al descubierto son lo único que tiene, también suele adornar tanto sus brazos como tobillos con pulseras doradas que consigue en grandes mercados, obviamente de fantasía, para terminar con una corona de flores rosas que acentúan ese aire delicado.

Coco nació y recio en una de las aldeas mas pequeñas de Alola, como una de las hijas del mismo líder lo cual le daba una pequeña ventaja en su día a día, disfrutando de una vida normal entre la naturaleza, su familia, una comunidad pequeña y el clima tropical que le brindaba la región. En su hogar no existía tal cosa como dinero ya que era demasiado pequeña, por lo que aprendió a valuar los bienes a forma de trueque, y también a brindar cualquier favor a otros en caso de que algún día ella necesitara ayuda. La vida, aunque muy tediosa, no era precaria ni mucho menos le daba ganas de buscar algo mejor, después de todo amaba a su gente y a su vez, ellos la amaban a ella.

Los años pasaron, y la joven pronto cumpliría los 13 años cuando, en una de las tantas expediciones de pesca, hubo una enorme tormenta que termino por volcar todas las barcas, y con ello ahogando a la mitad de los pescadores, sumergiéndola bajo las olas al punto que creyó morir por falta de oxigeno. Para su fortuna fue una de las pocas que pudieron rescatar, pero el temor al océano se impregno tanto en su cabeza que desde entonces le fue imposible volver a acercarse a las cosas, ni siquiera podía acercarse para llevar los suministros de vuelta a la aldea, cosa que le remordió en su consciencia por varoos años. Sin embargo, este suceso fue uno de los pocos momentos desagradables en su vida, o al menos eso es lo que le marcaba el destino de la isla.

Cuando hubo de cumplir los 18 fue comprometida con uno de los habitantes mas respetados, y, a pesar de que no estaba del todo segura de que fuesen una buena pareja, estaba dispuesta a seguir con las tradiciones, a lo que pronto se empezo a preparar la ceremonia para unir sus vidas. Todos parecían emocionados como era habitual, las bodas siempre eran motivo de fiesta y no podía estar mas de acuerdo, pero en la noche previa a la boda la aldea fue atacada por hombres con extrañas vestiduras y grandes Pokémon. El ataque se sostuvo durante la noche, las llamas pronto se esparcieron entre las palmas mientras los se llevaban a la mayor cantidad de personas en la oscuridad; Coco, al ser demasiado débil como para luchar, fue fácilmente secuestrada y metida dentro de un gran barco junto para no volver a ver a su región otra vez.

El viaje fue largo, no supo cuantos meses paso encerrada junto a sus amigos ya que los mantenian dentro de jaulas, mismas que compartían sitio con varios Pokemon extravagantes. Sus lagrimas se derramaron en silencio día y noche por temor a seguir siendo apaleada por los guardias que solo servían para tirarles migajas o aporrearlos cada vez que se portaban mal. Lo ultimo que supo es qu estaba en una región extraña, tan pronto volvió a poner pies sobre la tierra fue expuesta frente a una multitud y fue vendida, junto a varios de su grupo, a otra ¨compañía ¨ que se encargaba de prepararlos. ¿Eso estaba pasando de verdad? ¿Acaso jamas podría volver a casa? Estaba devastada, pero en ese negocio se le hizo creer que no había otra salida, que de hecho era afortunada por ser escogida como ¨mercancía¨ de calidad o de lo contrario seguro terminaba en algún burdel de mal augurio, incluso le dieron un pequeño Pokémon de compañía para que pudiera levantar el animo, como decían en el negocio. Así fue como paso todo un año siendo re-educada para servir a quien sea que se atreviera a comprarla, adoptando una posición sumisa ante su nuevo estilo de vida.

Al tiempo le fue notificado que seria enviada con su nuevo amo, un hombre llamado Rames II, quien era tan generoso como para recibirla como a su Petilil, mas sabia que por mas amabilidad que fuesen a mostrarle, ella ya había perdido su libertad para siempre.

☼ A pesar de su apariencia, es muy buena cuando se trata de sobrevivir sola en la intemperie, todo gracias a las dificultades de su antiguo hogar.
☼ Hasta el día de hoy sigue aterrada del océano y grandes lagos.
☼ No soporta a la gente que trata a los Pokémon como herramientas puesto que creció viéndolos como iguales.
☼ Tiene una melodiosa voz, gusta de cantar para los demás.
☼ Anteriormente se dedicaba a ser una cuenta-cuentos, pasaba las historias de sus antepasados así como leyendas a través de tapices, música y relatos a las mentes jóvenes de su aldea.

Una chica simple, de carácter amable y al igual que su apariencia, de sentimientos frágiles. No suele ir derramando miel a todas las personas que se topan en su camino, más no duda en acercarse de vez en cuando, brindar la mano a los demás y procura mantener una buena relación con todo aquel que le busque. Como muchas otras oculta cierta timidez entre sonrisas y manías raras como jugar con su cabello o manos, ante los desconocidos intenta ocultar que sus nervios le dominan pues considera que eso molestaría al prójimo, también se le ve como una joven que brinda apoyo emocional, dispuesta a escuchar aunque sea el más mínimo de los problemas una y otra vez de ser necesario, apelando a la empatía.

Calma y serena, suele verse guardando silencio por el simple gusto de la paz que este brinda. Intenta ser lo más honesta posible aunque sus propias inseguridades suelen llevarla a decir mentiras blancas para encubrir su pena, más una vez tiene confianza suficiente puede expresarse con toda naturalidad. La torpeza no se le escapa, en especial cuando está nerviosa pues nunca se fija por donde va, pese a ello inna con todas sus fuerzas mantener la compostura incluso en las situaciones más atroces. Se le ve como alguien gentil y que no dañara a una mosca, alguien subestimada que aprovecha ese mismo punto para moverse entre los conflictos.

A pesar de todo puede ponerse firme cuando se necesita, pese a tender una debilidad por ayudar a los demás puede negarse para demostrar que este siempre pudo haberlo hecho por su cuenta, sin mencionar que cuando por fin se le hace enojar puede dejar salir su demonio interno. Se aferra demasiado a las cosas que ama sin dejarlas ir por nada del mundo y esto sólo conlleva a la depresión una vez las ha perdido. Alguien que no sabe cuando rendirse, pero abierta a la crítica y consejos de quien considera alguien de confiar.

Una joven de al menos unos 1.58 metros y apariencia esbelta, delgada en extremidades y frágil apariencia, siempre se le confunde con una menor por sus facciones finas e infantiles, en especial por esos enormes ojos y expresivos color rosado así como su eterna sonrisa sobre sus delgados labios. Tanto sus manos como pies son pequeñas así como su busto y trastero permanecen modestos, su piel es de un color moreno tirando al caramelo, sin ser demasiado oscuro pero tampoco claro. Su cabello permanece siempre intacto, lacio, en corte recto, de brillo y suavidad impecables que suelen cubrir sus hombros descubiertos y llegando hasta su espalda, de un color castaño brillante.

Siempre se le ve con el mismo vestido blanco holgado que parecen ser dos piezas, manteniendo la superior como un tipo de chal que deja sus hombros desnudos y con los bordes adornados de brillantes amarillos. Zapatos de piso al descubierto son lo único que tiene, también suele adornar tanto sus brazos como tobillos con pulseras doradas que consigue en grandes mercados, obviamente de fantasía, para terminar con una corona de flores rosas que acentúan ese aire delicado.

Los orígenes de Nefertiti son desconocidos pues ella misma considera que su vida no inició como tal hasta que contrajo matrimonio con Ramses II, en su adolescencia, ocupando así el título de La Gran Esposa Real en el siglo XIX, la más amada entre la gran cantidad de su marido. En el pasado fue vista por él como la misma manifestación de Hathor en la tierra, Hathor, y era respetada y admirada como un igual por el faraón.

Por sus primeros años años Ramsés aún no había sido designado faraón, y ya estaba casado con otra mujer, Isis-Nefert, cuyo papel pronto desplazaría Nefertari. Al asumir el trono, tanto de Nefertari como de Isis-Nefert, ascendió a ambas al rango de grandes esposas reales. Sin embargo, ella fue la reina por excelencia; su particular carisma y el profundo amor que le profesaba Ramsés sumieron en la sombra a todas sus rivales, y la convirtieron en la mujer más importante del reino.

Más Nefertari no fue solo la esposa bienamada de su rey, era una verdadera mujer de estado, que propició el cese de hostilidades entre Egipto y el Imperio Hitita con sus cartas de paz al emperador Hattusili III y a su esposa, la también influyente emperatriz Puduhepa. El resultado fue el conocido como “Tratado de paz perpetua”. Puduhepa propiciaría la paz entre las dos potencias del momento, papel que la acabaría de consagrar al lado de su amante marido.

A lo largo de su reinado dio a luz al primer y segundo primogénito del faraón, con una vida tranquila a pesar de los celos entre las otras esposas y las disputas que debía manejar en su posición. Los intentos de homicidio entre su misma gente era algo de lo que siempre tuvo que estar atenta, pero lo que acabo con su vida fue la ultima plaga de Moises, uno de sus viejos amigos a los que tanto adoro en su vida, algo que no solo cambió el destino de su propio pueblo si no el de su familia. Si bien estaba feliz por la vida que compartió con sus seres amados, sentía no poder haber prevenido las plagas que acabaron con varios en su pueblo o poder apoyar a Ramses en lo que le quedaba de vida.

Actualmente vaga como un servant errante, sin saber qué o quién le invocó o para que propósito más allá de mediar en los conflictos que fue encontrando en su camino, aún si eran solo disputas entre niños. Hasta el momento no ha encontrado un lugar donde quedarse más de unos días ni un master que logre ganarse su confianza.

☼ A pesar de su apariencia, es muy buena cuando se trata de sobrevivir sola en la intemperie.
☼ El titulo que recuerda con mas cariño de su pasado es “Por la que brilla el sol”..
☼ Tiene una debilidad por las comidas dulces.
☼ Tiene una melodiosa voz, gusta de cantar para los demás.